jueves, 23 de enero de 2014

¿El tamaño importa?

Por Snow Fey, la boller


Me han pillado, no tengo ni idea de penes. Como estrella dorada que soy, los únicos que he visto son esos que salían los viernes por la noche en Canal+ y, por lo que tengo entendido, no son la norma fuera del glamuroso mundo de la pornografía. Así que voy a hablar de cosas que sí he manipulado con mis manos: dildos.


Los dildos son objetos mágicos que vienen en mil formas, colores y texturas. Entrar en un sex shop es como introducirte en un país de las maravillas, pero con cosas para introducirte en orificios. La primera vez que estuve en un sex shop me sentí como cuando Harry Potter vio Hogwarts en la primera película. Hay dildos dobles, de silicona, anales, del tamaño del pene de Hulk, e incluso se les puede añadir vibración, para que te dé más gustito. Con este amplio abanico de placer sexual es posible que ahora se sientan un poco abrumados. No pasa nada, es normal. Denme la manita si tienen miedo, y sigamos.

Tras una exhaustiva investigación, que es una manera guay de llamar a una búsqueda de Google, he descubierto que está en alza la compra de dildos de tamaños monstruosos. Ya lo decía aquella señora de la Teletienda “Yo no sé a las demás, pero a mí me gustan grandes.” Pues parece que a las demás también, señora. Aun así, también somos muchas las que nos fijamos en la forma. Porque, ¿qué es más importante? ¿Qué te rellenen como al pavo de Navidad o que tenga una textura que favorezca la estimulación y te muestre un mundo nuevo de sensaciones? Las dos cosas, por supuesto. Que no te hagan elegir, cuando lo puedes tener todo. Lo bonito de los dildos es que, al contrario que los penes, hay muchos a tu disposición en una tienda. Yo, sin duda, soy muy fan del que busca la estimulación del punto G. ¿Existe el punto G? No lo sé, pero a mí me da gustito.


Así que, señoras, señoritas y señores, ¿el tamaño importa? ¡Qué más da! ¡Lo importante es la variedad! Promovamos más la cultura del tupper-sex, visitemos más sex-shops. ¡Hay miles de posibilidades que probar! Te aseguro que cuando encuentres el que te gusta, se convertirá en tu mejor amigo hasta el fin de tus días. Fíjense si molan los dildos, que los hay hasta para fans de Jesucristo.


4 comentarios:

  1. Yo siempre he tenido una duda.. asi.. desde mi punto de vista heterosexual.. que me han intentado responder lesbianas no sin antes tener un microsegundo.. o diria mas, un nanosegundo de quedarse "pilladas" antes de responderme.. entre balbuceos e incoherencias varias.. ahi va.. si eres lesbiana, te gustan las mujeres.. porque buscais aparatos con formas falicas para daros placer.. porque buscais a "un hombre" ( lo que realmente nos define sexualmente, y somos los tios.. un pene, pero de plastico en este caso!!!).. para daros ese placer pleno???.. ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Porque la estimulación sexual de una mujer, entre otras formas, se consigue con penetración. Y oye, si quieres nos podemos penetrar con una pirámide, pero igual nos hacemos pupita...

      ¿Acaso no hay hombres heterosexuales que también buscan cosas con forma fálica para poder introducir por su ano?

      Eliminar
  2. En la cama nos gustan las formas fálicas, no los falos ni el resto del cuerpo que va pegado a ellos.

    ResponderEliminar
  3. El comentario de "anónimo" es para enmarcarlo y mostrar a las generaciones futuras como representación de la estulticia humana.

    ResponderEliminar